Una dieta sencilla, clara, efectiva y basada en la dieta mediterráneaque te ayudará a perder peso mientras incorporas nuevos hábitosalimentarios saludables y luchas contra el envejecimiento.Salud,belleza, comodidad, sentirnos mejor con nuestro cuerpo, rejuvenecidosy más ágiles.Estos son los principales objetivos que nos fijamoscuando empezamos una dieta y, aunque son razones suficientes paracomer de forma saludable durante el resto de nuestra vida, muchasveces acabamos arrinconándolas y recuperando las viejas costumbres. La mayoría de nosotros estamos sometidos a un ritmo de vida que nosdificulta prestar la atención necesaria a nuestro organismo y mimarlopara conseguir la mejor recompensa: el bienestar físico ypsicológico.A los obstáculos cotidianos (poco tiempo para hacer lacompra y cocinar, comer fuera de casa, comidas de compromiso, etc.),se suman unas dietas que, a menudo, exigen un alto nivel de sacrificio y son tan restrictivas que nos empujan a abandonar pronto. Por eso la dieta de los colores es sencilla y variada, porque una de sus máximas es hacer siempre de la comida un acto placentero y no convertirlo enalgo penoso, lo que aumentaría mucho nuestras posibilidades defracaso.El menú de nuestra dieta se divide en cuatro colores: rojopara las proteínas, vegetales y animales, verde para los vegetales,amarillo para el azúcar y los hidratos de carbono, y marrón para lasgrasas. Además, en el azul incluiremos los líquidos y los condimentos. Las mujeres seguirán la pauta 3 + 3 + 3 (tres alimentos del gruporojo, tres del amarillo y tres del marrón) y los hombres la de 4 + 4 + 4 (cuatro de cada grupo). Y ahora la buena noticia: el grupo verde es de consumo libre en cantidades y raciones para ambos sexos.¿A quéesperas para empezar la dieta de los colores y sentirte mejor, estarmás delgado y retrasar tu envejecimiento?