El Espectador nació con la intención de convertirse en una revistaunipersonal escrita por José Ortega y Gasset. Los muy diversosquehaceres del filósofo le impidieron cumplir el proyecto, peropublicó ocho tomos entre 1916 y 1934. En esta colección se ofrecen dedos en dos. Van aquí los dos primeros. Encontramos en ellos alpensador curioso de cuanto acontece en el mundo, que describe lo queve con una prosa llena de metáforas, especialmente bella en sus notasde viajes, y también algunas de sus reflexiones filosóficas másprofundas («Verdad y Perspectiva», por ejemplo), junto a la finacrítica literaria (sobre Baroja y Azorín) y artística (sobre Tiziano,Poussin, Velázquez).