La familia Perdomo ha habitado durante generaciones la dramática islade Lanzarote. Son una estirpe de pescadores formidables entre los quedestaca Yaiza, una belleza enigmática dotada de un don único que lepermite amansar a las fieras y hablar con los muertos, un don que seconvierte en la maldición de toda la familia y de todo aquel queconoce a Yaiza. En este inigualable trilogía, Alberto Vázquez-Figueroa nos transporta a través del océano de Lanzarote a América, y luego aLos Llanos de Venezuela y al misterioso Escudo Guayanés, tierra dediamantes, en un viaje por escenarios inhóspitos pero siempre llenosde magia y de poderosos y magnéticos personajes, algunos de ellos losmejores que haya creado nunca este autor.
La familia Perdomo ha habitado durante generaciones la dramática islade Lanzarote. Son una estirpe de pescadores formidables entre los quedestaca Yaiza, una belleza enigmática dotada de un don único que lepermite amansar a las fieras y hablar con los muertos, un don que seconvierte en la maldición de toda la familia y de todo aquel queconoce a Yaiza. En este inigualable trilogía, Alberto Vázquez-Figueroa nos transporta a través del océano de Lanzarote a América, y luego aLos Llanos de Venezuela y al misterioso Escudo Guayanés, tierra dediamantes, en un viaje por escenarios inhóspitos pero siempre llenosde magia y de poderosos y magnéticos personajes, algunos de ellos losmejores que haya creado nunca este autor.