Tres hermanos judíos y una visita a Auschwitz. Yasmina Reza disecciona la familia con humor negro y logra conmovernos. Tolstói dejó escritoen el célebre arranque de Anna Karénina aquello de que «Todas lasfamilias felices se parecen unas a otras, pero cada familia infeliz lo es a su manera». La familia de esta novela ?los Popper, judíosfranceses no practicantes de origen húngaro? es bastante disfuncional, como tantas otras.Los tres vástagos ?Serge, Nana y Jean, que es elnarrador de la historia? permanecen unidos por los lazos familiarespese a sus diferencias y tensiones. La vida los ha tratado regular, ymientras que Nana mantiene una sólida relación de pareja, los otrosdos tienen una vida sentimental cuando menos mejorable.Hay dos escenas que enmarcan esta narración: al principio el fallecimiento de lamadre y la última palabra que pronuncia, y después una visita al campo de exterminio de Auschwitz, lugar de peregrinaje como monumento a lamemoria, pero también parque de atracciones temático por el que sepasean turistas haciéndose selfies. Y es que este libro es, entreotras cosas, la cáustica crónica de los absurdos del siglo XXI. Laautora despliega aquí toda su capacidad de disección de loscomportamientos humanos, sus diálogos punzantes y su humor negrísimo y políticamente incorrecto, pero también su empatía hacia los seresimperfectos y paradójicos.Esta tragicomedia que indaga en la familia y en los estragos del ineludible paso del tiempo es una nueva muestradel inmenso talento de una escritora imprescindible. Yasmina Rezalanza sus dardos cargados de ironía y sarcasmo, pero al mismo tiempologra conmovernos con unos personajes dolorosa e hilarantementehumanos.