De vez en cuando, en la soledad del estudio, se le presentan a uno,como fantasmas, inmensos vacíos en la propia formación o preparación.Esto es triste y repetido. Julio Caro Baroja hace patente suhonestidad científica con la publicación de este libro, recuento deflaquezas propias y también de algunas ajenas: necesaria revisión deconceptos, olvidados algunos, perdidos otros. Material histórico yantropológico redescubierto a la luz de una perspectiva actual, peroatendiendo a las circunstancias del pasado que confluyeron en suconfiguración.