GENDRE, MARCO / GENDRE, MARCOS
Nadie se lo podía esperar. Ni siquiera ellos mismos. En 1970, losStooges lanzaron la bomba atómica. Su nombre: Fun House. Como todoslos grandes puntos de rotación del rock, su repercusión no fueinstantánea. Sin embargo, el paso de los años acabó por darle la razón a Iggy Pop, Dave Alexander y los hermanos Asheton. Fun Ho use ha sido tan influyente que sin su existencia nos veríamos abocados a unadimensión paralela de gramática rock subdesarrollado. ¿Qué habría sido de Joy Division sin este disco? ¿Y de los Dead Kennedys? ¿Y de Ash Ra Tempel? Fun House: el sonido del free-punk apunta a los tejidosinternos de esta obra, los disecciona, y nos los muestra en carneviva. No podría ser de otra forma, hablando de animales sin correacomo ,1970,, ,T.V. Eye, o ,Down On TheStreet,. Los Stooges estaban desatados, vomitaban poder, quemaban todo a su paso. Nunca jamás el lenguaje rock había sonado tanpeligroso y excitante. Del acoso y derribo al trance por induccióncatatónica, definitivamente, Fun House es el kilómetro 0 de los años,70. Un espacio temporal marcado con un compás en infinitarotación. El fuego y la suciedad. El punk y el free-jazz. ¿Alguien damás?