Hay quien nace donde debe pero fuera de época. Sernita de Jerez vinoal mundo en territorio chipén, cuando corrían malos tiempos para lalírica. En su adolescencia vio que la cosa se iba poniendo "muy dura", que el puchero no puchereaba. Entre los de su generación paisana letocó colocarse en la vanguardia emigrante, saliendo loco de contentocon su cargamento flamenco de entidad, llevando en su pensamiento todo un mundo de felicidad, pensando en remediar la situación del hogar,que era toda su ilusión. Y alegre el Sernita se fue por el mundo acantar. Con Susana y José, con Antonio el Bailarínà Y en Madrid seasentó, donde rubricaría sus mejores cantes. Gitano de casta y padrede una estirpe de artistas, como maestro siguió la escondida senda, la que nos aparta de prejuicios y ama a Andalucía entera, e hizo elpapel de pionero. En muchos sentidos es uno de los padres del flamenco contemporáneo, aunque el tiempo no le diese tregua a disfrutarlo,como expresa magistralmente José Manuel Gamboa, en esta obraentrañable, original y mágica, en la que los sentimientos, el gracejoy el rigor se mezclan para hacer de su lectura un refinadísimo placer.