Editado en 1981 e inencontrable hasta ahora, "Fuego en las entrañas"es un relato fresco, libérrimo, provocador y desopilante. Acompañadode las abruptas ilustraciones de Mariscal, de estilo intransferible,los empeños de Raimunda y Julio por detener la oleada deconcupiscencia que asuela Madrid, obra de un resentido magnate chinode las compresas, dan forma a una obra clave para entender losorígenes de la estética almodovariana, con cuyas primerasformulaciones se ha reencontrado en la reciente "Los amantespasajeros". Un festín de risas aseguradas.Chu Ming Ho, magnateoriental de la higiene íntima femenina, tiene problemas de mujeres:una tras otra, hasta cinco terminan por abandonarlo. Lleno deresentimiento, inventará una compresa con un poder irrefrenable: el de convertir al bello sexo en una destructiva máquina erótica dominadapor una pasión arrasadora y explosiva, capaz de dejar a los hombreshechos un guiñapo herido y lloroso. Solo Raimunda, la última de susamantes, y Julio, su marido químico y poeta, lograrán detener laepidemia.Publicada en 1981, cuando Pedro Almodóvar solo había dirigido "Pepi,Luci, Bom y otras chicas del montón", y descatalogada desde entonces,Fuego en las entrañas parte del folletín y la ficción de género yserie B para devolvernos al manchego en su vertiente más lúdica,irreverente y gamberra, y arroja un buen número de claves para leer su obra posterior: la sexualidad desprejuiciada y explícita, elantagonismo matrimonial o la solidaridad femenina que eclosionarían en películas como "¿Qué he hecho yo para merecer esto?" encuentran aquíuna primera expresión tan cómica como disparatada. Acompañada por lassingularísimas ilustraciones de Javier Mariscal, rotundas y llenas deángulos, "Fuego en las entrañas" es una pieza insustituible (y muypoco conocida) para comprender la carrera del cineasta español másuniversal de la historia, que, con su nueva película, "Los amantespasajeros" (en cuyo cartel también participó Mariscal), regresa a losterrenos que dejó atrás hace dos décadas, y que ya aquí empezaban atomar forma.El encuentro entre dos creadores esenciales de la culturaespañola atraerá a un público tan amplio como diverso. El rescate de"Fuego en las entrañas" es particularmente pertinente y actual, puesrepresenta la primera colaboración entre Almodóvar y Mariscal, queacaban de volver a trabajar juntos en la nueva película del manchego,"Los amantes pasajeros", y sienta las bases de una particular visiónde la comedia a la que, tras dos décadas, Almodóvar regresa con suobra más reciente.