En esta introducción a la vida y al pensamiento de Dorothy Day, una de las periodistas católicas más importantes del siglo XX, TerrenceWright consigue dibujar con sencillez y maestría su perfil decontornos radicales. Después de su conversión, con la ayuda delfrancés Peter Maurin, fundará el Movimiento del Trabajador Católico en 1933. Dedicada a encarnar con realismo las obras de misericordia,conjugará la fundación de casas y granjas de hospitalidad con su tarea de escribir fulminantes artículos en el Catholic Worker, periódicodifusor de la filosofía del Movimiento. Basándose en gran medida enlos escritos de Dorothy, este libro es una estupenda toma de contactocon sus fuentes de inspiración, tanto biográficas y sociales comopolíticas y espirituales. El autor explora tanto su filosofía radicalcomo su espiritualidad, que la condujeron hasta sus más controvertidas posturas pacifistas y contrarias a la doctrina de la guerra justa.Desde su muerte en 1980, Dorothy Day sigue siendo un modelo decompromiso cristiano con las grandes cuestiones sociales de su tiempoy con la búsqueda de la verdad y la dignidad de la persona humana,especialmente de los más oprimidos.
En esta introducción a la vida y al pensamiento de Dorothy Day, una de las periodistas católicas más importantes del siglo XX, TerrenceWright consigue dibujar con sencillez y maestría su perfil decontornos radicales. Después de su conversión, con la ayuda delfrancés Peter Maurin, fundará el Movimiento del Trabajador Católico en 1933. Dedicada a encarnar con realismo las obras de misericordia,conjugará la fundación de casas y granjas de hospitalidad con su tarea de escribir fulminantes artículos en el Catholic Worker, periódicodifusor de la filosofía del Movimiento. Basándose en gran medida enlos escritos de Dorothy, este libro es una estupenda toma de contactocon sus fuentes de inspiración, tanto biográficas y sociales comopolíticas y espirituales. El autor explora tanto su filosofía radicalcomo su espiritualidad, que la condujeron hasta sus más controvertidas posturas pacifistas y contrarias a la doctrina de la guerra justa.Desde su muerte en 1980, Dorothy Day sigue siendo un modelo decompromiso cristiano con las grandes cuestiones sociales de su tiempoy con la búsqueda de la verdad y la dignidad de la persona humana,especialmente de los más oprimidos.