Apenas iniciada la reforma del Carmelo, empuña Teresa de Jesú la pluma para resumir a sus Trece pobrecitas el ideal de la Descalcez. Asínace Camino de perfección, sus amigos censores se asustan al ver lalibertad de espíritu que reflejan algunos pasajes sobre todo los quese refieren a la penosa sitiación de la mujer en aquel momento, y lasmúltiples tachaduras que hacen en el original obligan a la madreTeresa a reescribir el libro.
María Jesús Mancho, profesora de la Universidad de Salamanca, ofrecepor primera vez, en esta edición, las dos redacciones. El lector puede de este modo contemplar en vivo todo el proceso de creación ydescubrir el trasfondo histórico de una de las obras más conmovedorasde la literatura española.